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Niña con desvarios rancios, con tendencias psicopáticas hacia el vampirismo y a la fotografía, trepadora de árboles y aduladora de las estrellas, con un corazón semi-partido en dos, que cree aún en el principe azul, en santa claus y en el conejo de pascua.

viernes, 31 de agosto de 2007

Perdí la creencia...



No crean en los hombres. Te prometen cielo y estrellas, pero cuando pueden olvidan todo y te engañan con la primera que ven. Lo llaman venganza, pero una sabe que es instinto y falta de compromiso. Te piden disculpas, pero creen que con eso compran toda una semana de llanto y sufrimiento causada por su supuesta venganza. Ellos nunca entenderán lo que tienes por dentro, sólo que mujeres hay muchas y vida una sola. Pero; ¿Quién es la que sufre? Tú. ¿Quién es la que le rompen en corazón? Tú. ¿Quién es la que cae como hoja de un árbol seco a sus pies y a sus arrastradas disculpas? Tú.
Aunque el mundo terminase mañana, Es improbable que sepan todo lo que nos pasa y lo que sufrimos. Por eso hay que ser capaz de olvidar...de no seguir sufriendo por aquel se causó nuestros males. No merecen tamaño honor.
Una debe ser capaz de darse cuenta hasta que punto pueder atarse a un Homo Sapiens Sapiens del tipo masculino. Hay que saber ver cuando en verdad valen la pena, por que si son de aquellos que buscan mujeres por el rato, o para hacerlas sufrir; mejor es ser un ave.
Podemos ser capaces de esperar al indicado, a nuestro príncipe azul sacado de un cuento de hadas; pero no todos los hombres lo son, sólo uno: el indicado. Ese por el cual nos desvivimos entre sueños, aquel que nos crea las maripositas en el vientre y nos hace sonrojar con cada palabra hermosa que florece de sus labios.
Pero....de esos...quedan pocos, y hay que buscarlos como hormigas en un campo.
Sólo nos quedan los que nos hacen sufrir o desean aprovecharse de nosotras, y de esos; tube al peor.
Por eso digo, como persona ya experimentada en ese tema...no crean todo lo que dicen los Hombres.